También cheesecake. Es una variante de tarta de queso cocinada en frío. Suele estar formada por tres capas: una con el queso cremoso como principal ingrediente, la base realizada con un crujiente de galletas machacadas y el top elaborado a partir de una mermelada o sirope.
INGREDIENTES para 16 personas:
25 uds galleta tipo María
100 grs mantequilla
500 grs queso cremoso*
375 grs leche condensada
1 ud zumo de limón
250 cc leche entera
2 sob cuajada Royal
300 cc nata (35% M.G.)
3 cs azúcar
300 grs mermelada frambuesa
2 cs agua
2 hoj gelatina neutra
*Tipo Philadelphia, mascarpone
ELABORACION:
Triturar las galletas y mezclar con la mantequilla, derretida, hasta obtener una masa homogénea. Repartir por la base de un molde desmontable de 22 cms de diámetro, apretando contra el fondo con ayuda de una cuchara sopera. Refrigerar un rato.
En un bol mezclar la leche condensada, el zumo de limón y el queso con batidora.
Separar un poco de leche entera y disolver la cuajada en polvo. Seguidamente calentar la leche restante, retirar del fuego y añadirle la mezcla de leche y cuajada, removiendo bien. Agregar a la crema de queso, batiendo hasta que quede sin grumos.
Montar la nata con el azúcar y añadir a la crema con movimientos envolventes para que no se baje mucho. Volcar en el molde sobre la base de galleta y volver a refrigerar, unas 4-6 horas.
Por otro lado, calentar en un cazo la mermelada con un par de cucharadas de agua, colar y echar sobre las hojas de gelatina, previamente hidratadas y escurridas, mezclando. Extender el sirope aún líquido sobre la tarta, ya fría, y distribuir regularmente moviendo el molde. Enfriar unas horas más hasta servir.
Consejos:
Forrar la base del molde con papel de hornear -que sobresalga del contorno- cerrándolo una vez forrado, así como la corona circular, adhiriendo una tira de papel pincelada con un poco de mantequilla.
Mejora de textura y sabor si se atempera sacándola de la nevera una hora antes de servir.
