Pan dulce de origen francés, que suele adoptar múltiples formas. Se sirve a menudo como pasteles o como base de un postre, con muchas variantes que añaden algunos ingredientes, rellenos o condimentos propios. También se utiliza como acompañamiento del foie gras. Hoy os ofrezco esta auténtica receta francesa en tres formas de presentación: la de pan clásico, la trenza y la redonda en gajos, que harán las delicias en vuestros desayunos, meriendas o postres. ¡Disfrutad!
INGREDIENTES para 10-12 personas:
250 grs harina floja
250 grs harina de fuerza
60 grs azúcar
12 grs sal fina
20 grs levadura fresca
5 uds huevo (250 grs)
40 cc leche
250 grs mantequilla
ELABORACION:
Echar en el bol de una amasadora las harinas, la levadura -previamente disuelta en la leche-, el azúcar, la sal y los huevos. Batir, usando el gancho, a velocidad baja (1 ó 2), durante 5 min.
Bajar la masa que se habrá subido hacia arriba del gancho y volver a amasar a velocidad 4 otros 10 min., bajándola del gancho alguna vez más. La masa puede no estar aún totalmente lisa. No importa.
Seguidamente añadir la mitad de la mantequilla, en pomada un poco fría, y continuar mezclando a velocidad 2. Cuando se vea que la mantequilla se ha integrado completamente a la masa añadir la otra mitad. Una vez que la masa se haya despegado completamente de las paredes del bol y esté bastante lisa, sacarla. Se trabaja con velocidades bajas porque no conviene que la masa supere los 25-26 ºC al sacarla. Se puede comprobar el punto de la masa si al estirarla ligeramente se transparenta sin romperse.
Bolear la masa sobre una superficie de trabajo y meterla dentro de un bol cubriéndolo con papel film una hora y media. Habrá levado casi al doble de tamaño. Sacarla y desgasificarla aplastándola con cuidado, bolearla nuevamente y meterla en otro bol, ligeramente engrasado con un poquito de aceite para que no se pegue, tapándolo con film y guardándolo en la nevera al menos 8 horas.
Transcurrido el tiempo, sacamos la masa -que habrá vuelto a leudar-, la desgasificamos nuevamente y la cortamos en porciones: por ejemplo, 4 de 50 grs. para un pan rectangular, 3 tiras de 100 grs. para una trenza y el resto en unos 12-13 pedazos de otros 50 grs. para un brioche circular “desgajable” como se ve en las imágenes u otros formatos al gusto.
Preparar los moldes necesarios, engrasados con mantequilla. Pincelar también ligeramente con aceite la superficie de trabajo y bolear sobre ella las porciones de 50 grs.: 4 de ellas se introducirán en un molde rectangular (de 1 litro); las 12 ó 13 se dispondrán en un molde circular de 24 cms. Las 3 tiras se convertirán con un suave amasado manual en rulos de unos 40 cms. de largo y se trenzarán comenzando por unir uno de sus extremos en un punto y cruzándolos alternadamente de forma holgada, sin apretarlos mucho. También se colocará esta trenza en un molde rectangular (de 1,5 lts.) adecuado al tamaño. Dejar todo en reposo en un lugar moderadamente templado para que fermenten hasta que dupliquen su volumen.
Precalentar el horno a 170ºC. Pintar los brioches con huevo batido y hacerles unos pequeños cortes en la superficie en forma de cruz con unas tijeras mojadas en agua.car. Hornear hasta que alcancen un agradable tono dorado (alrededor de 16 minutos), retirar, dejar atemperar y desmoldar en su caso.
¡Disfrutad del resultado de esta extraordinaria y auténtica receta del brioche francés!