La carne delicada del calabacín combina de maravilla con el sabor a mar de las gambas y la suavidad de la bechamel, gratinada con vuestro queso preferido. Es un plato fácil, vistoso y muy sabroso, que hará las delicias en tu casa.
INGREDIENTES para 4 personas:
4 uds calabacín grande
½ kg gambas
1 ud cebolleta
2 uds tomate
500 grs bechamel
150 grs queso rallado
sal
aceite de oliva
ELABORACION:
Cortar los calabacines longitudinalmente por la mitad y vaciar la pulpa con un sacabocados, procurando desechar las pepitas más grandes, dejando un ligero borde para que aguanten la forma al rellenarlos. Cocer en agua con sal 5-7 min según grosor, escurrir y reservar.
Picar finamente y sofreír en aceite la cebolleta, la pulpa extraída y los tomates. Una vez bien pochados, añadir las gambas –peladas– y rehogar un poco. Escurrir todo y reservar en un bol.
Preparar una bechamel como para croquetas (ver receta) y verter en el bol, mezclando bien con el sofrito.
Colocar los calabacines en una placa o fuente de horno, rellenar con la farsa y cubrir con queso rallado.
Gratinar en el horno, empezando por una posición baja y subiendo al final para obtener el tostado deseado.
