El pato es uno de los grandes protagonistas de la cocina francesa. El magret (derivado de magro) es un recorte de la pechuga de un ganso o pato cebado. El más popular en la cocina es el de pato. La pieza se hace en la misma grasa que suelta la piel. Esta forma de preparar los filetes de pechuga es relativamente reciente (mediados siglo XX), habiendo sido el confit, que no es una parte del pato sino una técnica de cocción a baja temperatura, la forma de elaboración tradicional.
INGREDIENTES para 4 personas:
2 uds magret de pato
100 cc nata líquida
100 grs queso roquefort
25 cc vino oporto
1 cp mostaza de Dijon
sal
pimienta
ELABORACION:
Quitar el exceso de grasa de los magrets y darles unos cortes cruzados oblicuos en el dorso, en forma de rombos, sin llegar a la carne. Salpimentar y juntar por el lado de la carne, atándolos.
Marcar en una sartén -sin añadir materia grasa- 4 minutos cada lado, hasta obtener un dorado tostado, vaciar la grasa soltada y continuar a fuego bajo con tapa durante 20 minutos, volteando un cuarto de vuelta cada 5.
Simultáneamente a los magrets, poner en una cacerola pequeña el queso desmenuzado, el oporto, la nata y la mostaza y calentar a fuego lento, dejando que reduzca hasta el punto de cremosidad deseado.
Desatar y cortar los magrets en filetitos y servir con la salsa.
Se puede acompañar con unas patatas cocidas, cortadas en rodajas y doradas en la grasa del pato.



